Hace exactamente una década surgió uno de los duetos más interesantes dentro del rock & roll gracias a la fama y talento de sus integrantes. Detrás de Tandoori Knights se encuentran el one-man-band Bloodshot Bill y Arish Ahmad Khan aka King Khan. Ambos son unos workaholics y no tienen tiempo para descansar.
Cualquier admirador de los sonidos grasosos, la imperfección y el desenfreno sonoro debe conocer el trabajo de ambos músicos. Gracias a que han compartido escenario en diversos festivales alrededor del mundo y tienen intereses similares, optaron por unirse y crear un proyecto que suena bastante similar a cualquiera de sus bandas originales, pero con la diferencia de que se busca reverenciar de forma visual al cine de Bollywood.
Pero debido a que ambos músicos cuentan con agendas bastante ocupadas y viven en países bastante lejanos entre sí (Bloodshot Bill en su natal Canadá y King Khan radica en Alemania), tuvieron un período de vida bastante corto. Su legado se resume al álbum Curry Up de 2009 y algunos 7", todos editados por Norton Records.
Ahora, después de ocho años de ausencia, Tandoori Knights está de regreso gracias a un sencillo publicado por el sello de confianza Slovenly Recordings. La combinación levanta muchas expectativas.
Por una parte, la cara A del material contiene la pieza "Temple of Boom", que tiene un inicio sereno y acústico para calentar los oídos. De forma paulatina, se incorpora el taladrante sonido de la batería y los riffs de la guitarra emulan los sonidos árabes. Lo que se obtiene es un tema idóneo para hipnotizar serpientes como suele ser una práctica común en la India.
A su vez, la cara B contiene "Tandoori Dolly", composición directa que fusiona el blues con el punk en partes iguales. Los arañazos a la guitarra son ligeros y sin caer en el exceso, lo que deriva en un adictivo rock & roll.
Pese al largo período de tiempo en el que el proyecto estuvo desaparecido, sus dos integrantes jamás se han alejado de la música. Eso se aprecia en sus dos nuevas canciones que no rompen esquemas pero tampoco decepcionan.